Las copas menstruales. ¿Qué son y como se usan?

Una copa menstrual es un recipiente fabricando habitualmente en silicona, látex o plástico quirúrgico (aunque habitualmente son de silicona) que se introduce en la vagina durante la menstruación y retén el flujo menstrual.

Las copas menstruales no absorben el flujo, como los tampones y las compresas, sino que este queda almacenado en su interior hasta que se vacía su contenido, por ejemplo, en el inodoro.

Al contrario de lo que pueda parecer, las copas menstruales no son un producto nuevo ni de reciente invención. Ya existían copas menstruales (muy rudimentarias, todo sea dicho) antes de 1900, y hacia los años treinta se empezaron a producir industrialmente en Estados Unidos. Durante la Segunda Guerra Mundial las copas menstruales se dejaron de fabricar, sobre todo, debido a la escasez del látex, necesario para su fabricación.

Hacia finales de los años ochenta las copas menstruales se volvieron a popularizar. Las había disponibles en varios tamaños, tenían mejor diseño, eran más resistentes y reutilizables.

¿Cuáles son las ventajas de utilizar una copa vaginal?

Utilizando una copa menstrual dejamos de producir residuos; su uso contribuye al medio ambiente. La vida útil de muchas de las copas menstruales del mercado es de diez años. ¡Imaginad cuántos productos desechables como compresas y tampones podemos dejar de usar en todo este tiempo!

Una copa menstrual representa un ahorro de dinero en comparación con la compra de compresas y tampones. Las copas que hay actualmente en el mercado son económicas.

Una copa menstrual es cómoda de usar; la podemos llevar puesta hasta 12 horas, en función a la cantidad de flujo menstrual que se produzca. Las hay de diferentes materiales o tamaños disponibles, se pueden comprar con o sin aplicador  y la copa menstrual se adapta a la anatomía o hábitos de vida de cada mujer. También se pueden utilizar de noche, podemos hacer ejercicio cuando la llevamos puesta y es segura.

Es más higiénica que los tampones o las compresas, ya que no tiene capacidad de retener gérmenes. De esta forma minimizamos o evitamos infecciones, candidiasis, cistitis y otras patologías infecciosas. Además, la silicona no se relaciona con el SST (Síndrome del shock tóxico), algo que sí ocurre con los tampones.

Actualmente las copas menstruales son un producto súper accesible. Incluso las encontraremos de muy blandas y flexibles, destinadas específicamente a mujeres con suelo pélvicos débiles.

¿Cómo se utiliza una copa menstrual?

El problema más común cuando se empieza a utilizar una copa menstrual es “familiarizarnos” con el proceso de introducción en la vagina. Primero deberemos doblar la copa correctamente y la introduciremos en el interior de la vagina y nos aseguraremos de que se haga bien el vacío para garantizar que no haya pérdidas.

Las copas tienen una capacidad de hasta 30 ml; esto hace que tengan que cambiarse menos a menudo. Para retirarse se tira de un extremo de ella, se vacía el inodoro, se limpia con agua y ya está lista para volverla a introducir.
En algunos casos hay copas que incorporan aplicador (para facilitar su colocación). Otras incorporan una especie de tapón en el extremo, que permite que el contenido de la copa se vacíe sin tener que retirar la copa completa.

Durante su uso no debemos sentir ninguna molestia. Si notamos que llevamos una copa menstrual puesta, entonces es que no está bien colocada.

Cuando el ciclo menstrual termina, la copa se puede hervir para esterilizarla o bien lavarla con agua, jabón y un cepillo suave, que no degrade el material.

Copas menstruales más conocidas en el mercado

Este es un pequeño resumen de las copas menstruales más conocidas. En la página web de cada fabricante encontraréis mucho material para la consulta, FAQs e instrucciones detalladas para la colocación de cada producto.

	Organicup Es hipoalérgica y libre de toxinas, apto para mujeres veganas, hecha 100% con silicona blanda de grado médico, de color blanco. Hay tres tamaños: Talla Mini (para adolescentes o mujeres que necesitan un tamaño pequeño), Talla A (para mujeres que no han tenido un parto vaginal) y Talla B (para mujeres que han tenido un parto vaginal). Web: https://www.organicup.com/es/
	Intimina Lily Cup De silicona media, de color rosa. Hay diferentes tamaños, y modelos. La One, para principiantes, anti fuga y muy fácil de poner y quitar. La A y B con una forma muy anatómica y las Compact, tamaño A y B, que son plegables. Web: https://www.intimina.com/es/
	Enna Cycle Es vegana, ecológica, fabricada con silicona biodegradable, con un aplicador para facilitar ponerla y un hilo muy delgado y largo para facilitar la extracción de su contenido. Se puede comprar junto a una Ennabox, un recipiente para esterilizar la copa en el microondas. Hay tallas, S, M, L. Web: https://www.enna.store/
	MeLuna Hecha de elastómero termoplástico (TPE), las hay diferentes tipos: Clásica: la más genérica. Sport: para mujeres deportistas. Soft: por vaginas sensibles. Es un 25% más blanda que la clásica. Shorty: para pelvis cortas o mujeres de baja estatura. Las hacen de diferentes colores y tallas. Web: https://www.copamenstrualmeluna.com/

Hay, pues, muchas copas menstruales en el mercado: marcas diferentes, tamaños, materiales…

Después de haber leído este post, seguro que sospecháis que muchas mujeres que comienzan a utilizar la copa menstrual no vuelven a usar más compresas ni tampones. Os invitamos a seguir investigando, encontrar y probar qué copa os resulta más cómoda.

Si tenéis cualquier duda sobre el uso de la copa menstrual y queréis contactarnos, en #Kilabe estamos a vuestra disposición para orientaros tanto como esté en nuestras manos.