En el curso de preparación al nacimiento que impartimos en el centro los padres juegan un papel muy importante.
Normalmente, durante todo el embarazo, el padre tiene un papel muy secundario, pero en el curso que impartimos en Kilabe el padre es tanto o más importante que la madre. Los padres también forman parte del embarazo y sobretodo del parto, y todas las madres los necesitan , se tienen que implicar desde el primer momento.
En nuestro curso explicamos una serie de ejercicios a realizar durante la dilatación, con la finalidad de facilitar la bajada del bebé por el complicado camino de la pelvis. Estos los realiza el padre a la madre, ella no los puede hacer sola.
Durante este proceso la madre padece las inevitables y necesarias contracciones del parto, y ella necesita concentrarse en tolerar el dolor. En este momento el padre, que no tiene contracciones, es quien controla los ejercicios que se hacen en cada momento, ha de tranquilizar a la madre, ha de estar en contacto constante con las comadronas, y sobre todo ha de disfrutar juntamente con la madre del momento más maravilloso de su vida.
El trabajo no acaba aquí, una vez ha nacido el bebé el padre no se separa en ningún momento del niño, la madre está agotada y no la dejarán levantarse por lo tanto el padre en estos momentos es vital, el ha de estar pendiente de todo y controlar todo lo que pasa. Durante las primeras horas, es muy importante que el padre cuide del bebé, cambiar los primeros pañales, pasar el pequeño a la madre para que se lo ponga en el pecho y controlar las visitas que no molesten a la madre ni al bebé.
En definitiva, lo mejor es vivir este momento en primera línea y disfrutarlo al máximo los tres juntos.
